San Miguel de Allende, Gto.- El Museo Casa Allende fue testigo de la charla que realizó el etnohistoriador Alberto Aveleyra Talamantes junto con la arqueóloga Gabriela Zepeda García, donde presentaron el artículo publicado en la revista de Arqueología Mexicana “¿Se puede localizar Chicomóztoc? Quetzalcóatl y Colhuacan Chicomóztoc en San Miguel de Allende.
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Alberto Aveleyra comentó que cualquier cosa que él pueda escribir sobre Cañada de la Virgen se basa totalmente en el profundo trabajo que hizo Gaby y su equipo de colaboradores, además expresó que todos los sanmiguelenses han vivido la larga historia de este lugar de Cañada de la Virgen, pero ellos creen que su nombre original fue Colhuacan Chicomóztoc.
“Sabemos que es un tema controvertido porque hay muchas posturas distintas, y esas posturas distintas es porque no hemos tenido evidencia material de ningún sitio que realmente se tuviera con relación a las descripciones que tenemos de este lugar, tanto visuales porque tenemos múltiples códices, pero tenemos alrededor de 80 fuentes escritas y pictográficas que refieren este lugar”, expresó Alberto.
Expresó que no tienen datos en ningún sitio arqueológico que permitan hacer una correlación eficiente, además indicó que cuando él estudiaba pensaba que Chicomóztoc era mitológico, luego que había varios en diferentes sitios.
Asegura que hoy después de investigar 8 años el tema de Cañada empieza a pensar que solo hubo un Chicomóztoc y que se encuentra en San Miguel de Allende, porque, “uno de los elementos clave para descartar la existencia de un solo Chicomóztoc y pensar que hubo varios Chicomóztoc es que varios autores lo dicen como lo voy a decir, parece improbable que los mayas de Guatemala y Yucatán hayan ido al mismo Chicomóztoc al que fueron los aztecas que todas las fuentes lo ubican al norte de Tula”, comentó Alberto.
Cuestionó en su discurso, por qué dejar de pensar que hay varios y solo en Cañada de la Virgen, asegurando que es por los datos de ADN que está arrojando la investigación, ya que al momento tenemos ADN Maya lacandón ubicados actualmente a 1500 kilómetros al sur de nuestras tierras chichimecas, por lo que no es posible seguir pensando que los mayas tuvieron otro Chicomóztoc, porque pensamos que los mayas no se movían de su sitio.
Agregó que esta investigación empezó cuando él solo quería escribir una pequeña guía sobre la experiencia de caminar en Cañada y al caminar sobre la calzada varias ocasiones le hizo darse cuenta que esa calzada fue diseñada intencionalmente para que fuera la gente caminando por ella y aparecieran elementos del paisaje sagrado y de la arquitectura ceremonial en momentos muy precisos del recorrido y en esos momentos empezaba un diálogo, la calzada ceremonial es un aula de clases por decirlo así y el pizarrón es todo el paisaje.
“Ahi fue cuando me sorprendió que ninguno de nosotros nos habíamos preguntado por qué calzada empieza en la cañada y dónde desembocan las aguas de ese arroyo, entonces ahí fue cuando nos dimos cuenta de todo el recorrido que tenían que hacer los peregrinos y nos dimos cuenta que entrar en la cañada era entrar a un útero, a una matriz y al revisar pues nos damos cuenta que hay 7 cañadas y al verlo por Google Earth pues recuerdo el códice que acabamos de ver, que en realidad se parece, y más impresionante que el sitio esté en la séptima cañada”, indicó Alberto.
Finalizó diciendo que hay un conjunto de datos topográficos, hidrográficos, de asentamiento, procesionales, funerarios e iconográficos que apuntan a la correlación del altépetl-útero de siete cabañas y la zona arqueológica Cañada de la Virgen con el Colhuacan Chicomóztoc de las fuentes históricas, hipótesis que, junto con los datos y fuentes locales presentadas, se suma a la discusión de tan importante lugar en la historia de Mesoamérica que es Cañada de la Virgen.