CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- En tan sólo dos meses, han sido reportados ocho incendios en reservas naturales y área rural del mismo número de municipios, entre ellos Celaya, que han consumido mil 557 hectáreas, afectando la fauna y la flora, pero además dichos incendios han elevado la contaminación en el estado; por lo que se hizo un llamado a la población, porque la mayoría de dichos incendios son cometidos por los hombres.
Así lo anunció la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial, María Isabel Ortiz Mantilla, quien detalló que en la zona sur de Celaya se consumieron 45 hectáreas de área natural protegida; y reconoció no estar informada sobre otras 600 hectáreas de árboles que recientemente fueron consumidas en este municipio.
Detalló que el 8 de marzo se reportó un incendio en Cuerámaro, en donde fueron consumidas 50 hectáreas de vegetación, entre ella árboles antiguos; el 21 de marzo también se reportó un incendio forestal en Pénjamo, en donde se quemaron 14 hectáreas de reserva natural.
De igual forma, el 2 de abril, en Manuel Doblado fue reportado un incendio que consumió una hectárea; mientras que el 3 de abril inició un segundo incendio en Cuerámaro, en donde hasta ayer se habían consumido mil 400 hectáreas, y hasta el momento no ha sido posible el control, ya que es selva baja, y los accesos son difíciles para llegar con maquinaria y controlar el fuego.
El 14 de abril también fue reportado otro incendio en el municipio de Yuriria y en donde se consumieron 35 hectáreas; y aunque se habla de matorrales y maleza, también fueron afectados árboles y plantas, así como la fauna de la zona.
Para el 18 de abril, en Abasolo, se controló un incendio, que finalmente consumió 10 hectáreas de pastizal y árboles. En este mismo día, pero en Cuerámaro, nuevamente se reportó otro incendio que consumió 2 hectáreas.
Para el 24 de abril, en Celaya se reportó un incendio, que consumió 45 hectáreas, pero de las 600 hectáreas consumidas por el fuego, según los protocolos, fue atendido por Protección Civil de la ciudad y lo controló.
En cuanto a la suma total de las mil 557 hectáreas consumidas, reconoció que el daño a la flora y fauna, así como al medio ambiente, es grave, porque son cientos de animales los perjudicados, así como la vegetación que representa el pulmón de la ciudad.
Reiteró el llamado a la población en general, para que no se queme la basura, ni pastizales o de terrenos baldíos, porque ocasionan los incendios forestales, incluso, dañando a la naturaleza gravemente.
Se pide a la población no dejar botellas de cristal en campos o áreas verdes protegidas, cuando se va de día de campo, porque con el sol se convierten en armas letales que levantan el fuego y consumen grandes extensiones de árbolesMaría Isabel Ortiz Mantilla