/ viernes 9 de agosto de 2024

60% de empresas en Guanajuato ya implementan jornada laboral de 40 horas semanales

Las empresas buscan adaptarse y crear en los trabajadores una cultura de responsabilidad

CELAYA, Gto.- A pesar de que aún no se aprueba la iniciativa de ley para que la jornada laboral pase de 48 a 40 horas a la semana, con dos días de descanso, el 60% de las empresas en Guanajuato han implementado el cambio de dicha jornada laboral, buscando adaptarse y crear en los trabajadores una cultura de responsabilidad, puesto que en la actualidad el mexicano no está preparado en dar un mayor rendimiento en menor tiempo, como sucede entre los europeos, incluso, en el caso de los franceses que tienen un mes de vacaciones, pero antes dejan la producción suficiente para atender la demanda del tiempo en que ausentarán.

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Así lo informó Juan Gabriel Sánchez Martínez, organizador del XVIII Foro Regional de Seguridad Social 2024 que el Instituto Mexicano de Contadores Públicos, Celaya, llevará a cabo el viernes y sábado.

“No hay nada aprobado. Siguen existiendo los mismos días de descanso obligatorio que marca la Ley Federal del Trabajo: 1 de enero, 5 de febrero, 21 de marzo, 1 de mayo, 16 de septiembre, 20 de noviembre y 25 de diciembre, y el 1 de octubre, en cada cambio de sexenio federal”, detalló.

Está en espera la aprobación de la iniciativa del trabajo de 40 horas, y explicó que representa un mayor descanso, quitarle 8 horas a la semana laboral.

“Nuestra cultura laboral en México no está adaptada a las grandes culturas del viejo Continente. Primero tenemos que darle esa mentalidad al trabajador, de lo que se hacía en 48 horas, debe hacerse ahora en 40 horas. Hablo de manera personal. No estamos preparados como para que el operativo labore 40 horas, produciendo lo que producía en 48. No será posible”, enfatizó.


El Contador Público Juan Gabriel Sánchez Martínez, informó en la actualidad, ya hay un 60% de empresas en Guanajuato que ofrecen a sus trabajadores los dos días de descanso. |Foto: José Sánchez / El Sol del Bajío


Afirmó que esto provocará tener una jornada adicional laboral; con la reducción de ocho horas a la semana generará para muchas empresas una cantidad no productiva, ocasionará tiempos extras, un turno siguiente.

“La parte más trascendental para las empresas, si lo hicieran, es que, si se reduce la jornada laboral, también tendrían que reducir el sueldo. Por poner un ejemplo, si una empresa paga 300 pesos por día, durante 48 horas a la semana, la Ley del Trabajo me obliga a remunerar, de acuerdo a lo que se produce, de acuerdo al contrato. Si el contrato dice que son 48 horas laboradas a la semana, y se paga un sueldo de 3 mil pesos a la semana, tiene todo el derecho en pedir que al trabajar 40 horas, se cambia el contrato, y en vez de 2 mil pesos a la semana, por ejemplo, se paga mil 900”. Detalló.


En el medio laboral, existen trabajadores excelentes que trabajan por necesidad, por convicción, por vocación. | Foto: Cortesía


Dijo que puede tener afectación un trabajador, pero se tiene que esperar, primero a que se apruebe; después, cómo se aprobará, porque, agregó, lo más seguro que es con la aprobación que se dé, van amarrar a las empresas para que no puedan bajar el sueldo desde el momento en que se apruebe.

“Si no mueven el sueldo y dejan, por ejemplo, dos mil pesos a la semana por 48 horas, y ahora dejan los dos mil pesos por 40 horas, eso le beneficiará; pero el punto está en que las 48 horas producían un millón de unidades, por 40 horas van a producir 900 mil unidades, las restantes no se van a poder vender; y si no se venden, la empresa dejará de tener ganancias para pagar ese sueldo”, comentó.

Enfatizó que la empresa terminará diciendo al trabajador que se vuelva productivo, si produce el millón de unidades en 40 horas, y la empresa otorga los dos días de descanso, ambos se benefician.

“En la práctica que nosotros tenemos en la actualidad, hay empresas que ya trabajan hasta el viernes, una cantidad considerable de empresas. De lo que me toca ver, un 60% de empresas ya tienen las 40 horas a la semana. Yo manejo 12 empresas, de las cuales ocho ya tienen trabajando hasta el viernes”, explicó.

Agregó que dichas empresas se dan cuenta que, en la parte operativa del trabajador, se le contrató para decirle “me vas a trabajar de lunes a viernes, pero me vas a producir esta cantidad, y vas a descansar sábado y domingo”; entonces el trabajador sabe y se compromete, o se va adaptando.

Reconoció que será muy complicado cambiar la cultura del mexicano, de producir más en menos tiempo, porque ya habrá una ley que les dará esa facilidad de trabajar sólo hasta el viernes.

Dijo que en este momento no hay ley, no hay cambio, pero aún así el 60% de empresas ya están aplicando el sistema de 40 horas a la semana, y lo que él maneja, reconoció, es una muestra en el municipio y en el Estado de Guanajuato.

“La parte que le corresponde a la empresa, es darle un beneficio al trabajador, buscar que el trabajador sea productivo, y la mejor forma de hacerlo es darle sus beneficios también, como los dos días de descanso, y los trabajadores lo aprecian, por lo que es cuestión de fomentar la cultura de la responsabilidad y compromiso”, resaltó.

Expuso que la muestra de ocho empresas, se ha visto que tienen dos conflictos: los trabajadores no se adaptan, no llegan a las metas y siempre se tiene que meter horas extras; pero a pesar de ello, las empresas lo han hecho para anticiparse a lo que puede venir.

“Lo más importante es poderle decir al trabajador, yo, como empresa, sin que me obliguen, estoy en la disposición de beneficiarte, pero ahora te toca a ti, trabajador, responder. Cuando ya llegue la obligación, el ejemplo de producción de un millón de unidades en 48 horas, no será posible en las 40 horas, y podría ser porque el trabajador sentirá que la ley lo ampara”, expuso.

Sin embargo, también reconoció que, en el medio laboral, existen trabajadores excelentes que trabajan por necesidad, por convicción, por vocación.

“Hay de todo. Pero yo insisto, antes de meter una medida, hay que darle cultura a todo, al trabajador, administrativo, supervisor, jefes, todos tienen que meterse a una cultura de poder decirles la parte que le toca al empresario, que tiene el deseo de darle beneficios al trabajador, y si el trabajador recibe ese beneficio, el trabajador va a responder con responsabilidad”, concluyó.

CELAYA, Gto.- A pesar de que aún no se aprueba la iniciativa de ley para que la jornada laboral pase de 48 a 40 horas a la semana, con dos días de descanso, el 60% de las empresas en Guanajuato han implementado el cambio de dicha jornada laboral, buscando adaptarse y crear en los trabajadores una cultura de responsabilidad, puesto que en la actualidad el mexicano no está preparado en dar un mayor rendimiento en menor tiempo, como sucede entre los europeos, incluso, en el caso de los franceses que tienen un mes de vacaciones, pero antes dejan la producción suficiente para atender la demanda del tiempo en que ausentarán.

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Así lo informó Juan Gabriel Sánchez Martínez, organizador del XVIII Foro Regional de Seguridad Social 2024 que el Instituto Mexicano de Contadores Públicos, Celaya, llevará a cabo el viernes y sábado.

“No hay nada aprobado. Siguen existiendo los mismos días de descanso obligatorio que marca la Ley Federal del Trabajo: 1 de enero, 5 de febrero, 21 de marzo, 1 de mayo, 16 de septiembre, 20 de noviembre y 25 de diciembre, y el 1 de octubre, en cada cambio de sexenio federal”, detalló.

Está en espera la aprobación de la iniciativa del trabajo de 40 horas, y explicó que representa un mayor descanso, quitarle 8 horas a la semana laboral.

“Nuestra cultura laboral en México no está adaptada a las grandes culturas del viejo Continente. Primero tenemos que darle esa mentalidad al trabajador, de lo que se hacía en 48 horas, debe hacerse ahora en 40 horas. Hablo de manera personal. No estamos preparados como para que el operativo labore 40 horas, produciendo lo que producía en 48. No será posible”, enfatizó.


El Contador Público Juan Gabriel Sánchez Martínez, informó en la actualidad, ya hay un 60% de empresas en Guanajuato que ofrecen a sus trabajadores los dos días de descanso. |Foto: José Sánchez / El Sol del Bajío


Afirmó que esto provocará tener una jornada adicional laboral; con la reducción de ocho horas a la semana generará para muchas empresas una cantidad no productiva, ocasionará tiempos extras, un turno siguiente.

“La parte más trascendental para las empresas, si lo hicieran, es que, si se reduce la jornada laboral, también tendrían que reducir el sueldo. Por poner un ejemplo, si una empresa paga 300 pesos por día, durante 48 horas a la semana, la Ley del Trabajo me obliga a remunerar, de acuerdo a lo que se produce, de acuerdo al contrato. Si el contrato dice que son 48 horas laboradas a la semana, y se paga un sueldo de 3 mil pesos a la semana, tiene todo el derecho en pedir que al trabajar 40 horas, se cambia el contrato, y en vez de 2 mil pesos a la semana, por ejemplo, se paga mil 900”. Detalló.


En el medio laboral, existen trabajadores excelentes que trabajan por necesidad, por convicción, por vocación. | Foto: Cortesía


Dijo que puede tener afectación un trabajador, pero se tiene que esperar, primero a que se apruebe; después, cómo se aprobará, porque, agregó, lo más seguro que es con la aprobación que se dé, van amarrar a las empresas para que no puedan bajar el sueldo desde el momento en que se apruebe.

“Si no mueven el sueldo y dejan, por ejemplo, dos mil pesos a la semana por 48 horas, y ahora dejan los dos mil pesos por 40 horas, eso le beneficiará; pero el punto está en que las 48 horas producían un millón de unidades, por 40 horas van a producir 900 mil unidades, las restantes no se van a poder vender; y si no se venden, la empresa dejará de tener ganancias para pagar ese sueldo”, comentó.

Enfatizó que la empresa terminará diciendo al trabajador que se vuelva productivo, si produce el millón de unidades en 40 horas, y la empresa otorga los dos días de descanso, ambos se benefician.

“En la práctica que nosotros tenemos en la actualidad, hay empresas que ya trabajan hasta el viernes, una cantidad considerable de empresas. De lo que me toca ver, un 60% de empresas ya tienen las 40 horas a la semana. Yo manejo 12 empresas, de las cuales ocho ya tienen trabajando hasta el viernes”, explicó.

Agregó que dichas empresas se dan cuenta que, en la parte operativa del trabajador, se le contrató para decirle “me vas a trabajar de lunes a viernes, pero me vas a producir esta cantidad, y vas a descansar sábado y domingo”; entonces el trabajador sabe y se compromete, o se va adaptando.

Reconoció que será muy complicado cambiar la cultura del mexicano, de producir más en menos tiempo, porque ya habrá una ley que les dará esa facilidad de trabajar sólo hasta el viernes.

Dijo que en este momento no hay ley, no hay cambio, pero aún así el 60% de empresas ya están aplicando el sistema de 40 horas a la semana, y lo que él maneja, reconoció, es una muestra en el municipio y en el Estado de Guanajuato.

“La parte que le corresponde a la empresa, es darle un beneficio al trabajador, buscar que el trabajador sea productivo, y la mejor forma de hacerlo es darle sus beneficios también, como los dos días de descanso, y los trabajadores lo aprecian, por lo que es cuestión de fomentar la cultura de la responsabilidad y compromiso”, resaltó.

Expuso que la muestra de ocho empresas, se ha visto que tienen dos conflictos: los trabajadores no se adaptan, no llegan a las metas y siempre se tiene que meter horas extras; pero a pesar de ello, las empresas lo han hecho para anticiparse a lo que puede venir.

“Lo más importante es poderle decir al trabajador, yo, como empresa, sin que me obliguen, estoy en la disposición de beneficiarte, pero ahora te toca a ti, trabajador, responder. Cuando ya llegue la obligación, el ejemplo de producción de un millón de unidades en 48 horas, no será posible en las 40 horas, y podría ser porque el trabajador sentirá que la ley lo ampara”, expuso.

Sin embargo, también reconoció que, en el medio laboral, existen trabajadores excelentes que trabajan por necesidad, por convicción, por vocación.

“Hay de todo. Pero yo insisto, antes de meter una medida, hay que darle cultura a todo, al trabajador, administrativo, supervisor, jefes, todos tienen que meterse a una cultura de poder decirles la parte que le toca al empresario, que tiene el deseo de darle beneficios al trabajador, y si el trabajador recibe ese beneficio, el trabajador va a responder con responsabilidad”, concluyó.

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