Washington.- La Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC) llamó hoy al presidente Donald Trump a desechar su plan de ampliar la imposición de aranceles a las importaciones de acero y aluminio, y advirtió que serían un impuesto para los consumidores estadounidenses.
“Estados Unidos no debe expandir los aranceles a las importaciones de acero y aluminio a países adicionales a partir del 1 de junio, como se ha amenazado”, señaló el vicepresidente de Asuntos Internacionales de la USCC, Myron Brilliant.
La administración Trump extendió hasta el 1 de junio la exención a México, Canadá y la Unión Europea para la imposición de aranceles a las exportaciones de esos productos a Estados Unidos.
La ampliación de los aranceles “impactaría a los manufactureros estadounidenses con más altos costos, desaceleración del crecimiento del sector de la construcción y pondría frenos en la creación de empleos en ambas industrias clave”, señaló.
A mediados de mayo, el secretario de Comercio, Wilbur Ross, indicó que el presidente Trump decidirá el 1 de junio próximo si extiende las exenciones arancelarias a México y Canadá, dependiendo del estado de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) .
La cúpula empresarial estadounidense destacó que los precios del acero estadounidense ya son casi 50% más alto que los de Europa y China, mientras que los precios del aluminio han sido “extremadamente volátiles”.
Brilliant advirtió que la eventual imposición de los aranceles provocaría represalias generalizadas del exterior y pondría en riesgo el impulso económico logrado por la administración estadounidense después de las reformas fiscales y regulatorias.
“Hacemos un llamado a la administración a tomar este riesgo seriamente”, aseveró la USCC.