ACÁMBARO, Gto. (OEM-Informex).- Debido a los bajos niveles de la Presa Solís, actualmente se puede visualizar la Iglesia de Puruagüita que quedó sumergida en las aguas de este cuerpo de agua desde hace más de 70 años.
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La Presa Solís principal obra hidráulica del Centro y Occidente de la República Mexicana inició en el año de 1939 y fue inaugurada un 15 de mayo de 1949 por el expresidente de México Miguel Alemán Valdés.
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La construcción de la presa implicó la movilización o reubicación de 22 poblados a nivel regional entre los municipios de Acámbaro, Jerécuaro y Tarandacuao, entre ellos la comunidad de Puruagüita.
El licenciado en Geohistoria, Erik Núñez Castro refirió que la antigua comunidad de Puruagüita quedó sumergida en las aguas de la Presa Solís justo donde se encuentra la Iglesia en ruinas, el cual fue un templo dedicado al apóstol San Pedro, “por sus características arquitectónicas data de la segunda mitad del siglo 18, posee solo una nave con un solo acceso, con una estructura de mampostería de piedra cal y arena”.
Dijo que “Actualmente conserva lo que son sus cubiertas a base de bóveda de crucería, de cantería y posee un ábside en la parte posterior donde se encontraba propiamente el altar el cual tiene en la parte superior una cúpula de forma de media naranja con interinilla la cual era el espacio más sagrado del templo, tiene el arco de lo que era un coro”.
Agregó que por las características y años de construcción fue administrado por la orden de franciscanos, “Este templo fue desmantelado de su altar y todos los objetos de valor en su interior, actualmente se encuentra en estado ruinoso por la inundación producida de la presa durante más de 70 años”.
Informó que “el pueblo de Puruagüita viejo se instaló donde se encuentra la Iglesia en ruinas en el año de 1685 aproximadamente; un pueblo con casas sencillas de adobe y a su alrededor diferentes comunidades como la Estanzuela, Paso de Ovejas, Puruagüa”.
Indicó que la comunidad de Puruagüita era un lugar dinámico por el flujo de personas que pasaban por este lugar para desplazarse a sus comunidades, “Desde Puruagüita viejo la gente podía llegar hasta Acámbaro por un camino a un costado del río, era un valle rodeado de cerros”.
Señaló que el único registro que se tiene de este antiguo pueblo son algunos de los documentos donde se indica lo que contenía la Iglesia y los pagos que se realizaban para que se hicieran las fiestas como la zirangüa. Así como el mapa que se encuentra en la Hacienda de Puruagüa.