Querétaro, Qro.- Este es tu sitio ideal, si lo tuyo es cuidar del medio ambiente, estar en contacto con la naturaleza y pasar un fin de semana relajado.
Las viviendas sustentables son parte ya del compromiso de una mayoría de los servicios turísticos, cuidar de la naturaleza que tanto hemos lastimado. Con ese reto Casita Bugambilia diseñó un paradigma de construcción y de vida, creando una responsabilidad ambiental, favoreciendo el desarrollo sostenible que han generado y regulando los recursos.
A 7 kilómetros del centro de Jalpan de Serra, en la Sierra Gorda queretana, el desarrollo cuenta con 3 diseños de cabañas: Limonaria, Carmelina y Bugambilia, construidas de arcilla y atendidas por sus propietarios Lluvia Abril Robledo Rodríguez y Paul Kenney Pedraza.
El lugar es automáticamente nuevo, pues apenas se logró terminar el proyecto en febrero 2022 y pertenece a los diferentes negocios que conforman los prestadores de servicios del Clúster Turístico Jalpan, que a través de diferentes medios logran posicionar cada vez más este destino turístico.
VIVIENDAS SUSTENTABLES
El hospedaje ecológico que ofrecen es un diseño de cabaña todo elaborado con arcilla, utilizan baños secos y se encuentran en medio de una gran reserva de la Biosfera Sierra Gorda, un área natural protegida en donde lo que más cuidan es el agua, tanto para el estado de Querétaro como Guanajuato.
En el lugar se pueden encontrar diferentes tipos de vegetación de bajo mantenimiento, esto por la conservación del vital líquido.
Las ecotecnias que se mantienen son:
- Calentadores solares
- Baños secos
- Captación de agua pluvial
- Compostas
- Generación de abono
- Huertos orgánicos
A decir de Lluvia, ellos no se encuentran conectados a una red de agua ni de drenaje y están en espera, para el próximo año, de contar con la infraestructura para la captación de luz solar y ser 100 por ciento un sitio sustentable.
Para quienes visitan estas casitas se podrán encontrar con que cada uno de los módulos es diferente y alberga separadas las funciones principales de una casa. En el interior de ellas se percibe una calidez máxima y eficiencia; un salón revestido de maderas viejas recicladas, todo al tamaño, no hay mobiliario extra, tan solo lo necesario para descansar y convivir. La mesa de comedor invita a relajarse y degustar de platillos elaborados con los propios ingredientes que ofrece el lugar extraídos de su propia parcela.
Los baños secos hacen reflexionar acerca de la importancia que genera cuidar el agua.
La parte externa invita a reflexionar con verdes y bellos parajes que en la noche contrastan con la luz de la luna y las estrellas, el cantar de los grillos, al frente de la fogata entablando una unión y conexión espiritual muy especial.
El proyecto se concibió siempre de manera cuidadosa, queriendo la familia vivir de una mejor manera, respetando el lugar, los materiales, las personas y el entorno al máximo, en donde como resultado dio unas casitas con cero huellas de impacto, sencillas, y adaptada a la meteorología gracias a las tecnologías sostenibles.
Cruzar sus campos que conectan una cabañita de otra es una experiencia desde los olores que despiden las flores, las matas y en general la vegetación.
Aquí podrás encontrar todo para disfrutar de una experiencia cargada de magia que además es amigable con el medio ambiente.