"Hay dos tipos de personas en el mundo que te van a decir que no puedes marcar diferencias: los que tienen miedo de intentarlo y los que tienen miedo de que lo consigas". Ray Goforth.
Claude Monet y Camille Pissarro son considerados los padres del impresionismo en la pintura. Paul Gauguin fue un referente para el expresionismo alemán y el fovismo, el movimiento pictórico que uso de colores puros en contrates violentos aplicados sin mezcla, cambios importantes en el arte de la pintura utilizando colores para crear imágenes reales o ficticias. Vicisitudes que, como en la música, difiere el estilo de la época Renacentista, al Barroco, luego al Clasicismo, al Romanticismo, al periodo Moderno y al Contemporáneo, que uso para ejemplificar que en cualquier actividad de la vida se presentan contrastes que dan paso a diferenciar los tiempos.
Dos siglos antes, René Descartes sentenció, “Pienso, luego existo” tres palabras que encierran uno de los principios fundamentales de la filosofía moderna, y como dice el filósofo y físico francés, el ser humano es energía pura que rebosa el pensamiento para saber más de lo que le rodea. Siendo el hombre por naturaleza social, religioso y político, consciente o subconscientemente busca, examina, investiga y evalúa lo que ve y siente para cambiar el rumbo, forma de ser y actuar en las diferentes actividades, semejante a los cambios que a través de los siglos han pasado en la maestría de las artes para establecer un antes y un después. Todo fluye, todo cambia, nada permanece. (Heráclito)
Un antes y un después de pequeñas cosas que suceden en el seno de la familia. Un antes y un después en la vida que distingue la Prehistoria, la Edad Antigua, la Edad Media, la Edad Moderna y la Edad Contemporánea. Antes y un después de acontecimientos que trascendieron en la política, en la economía, en la religión o que modificaron el mapa terrestre como el descubrimiento de América; un antes y un después de la Segunda guerra Mundial y un largo etcétera de efemérides relativas al cambio evolutivo y universal de la humanidad.
Acercándonos a la vida de hoy, está en boca el antes de la Pandemia y después de ella, en mi opinión, el principal cambio ha ido de la mano a la ciencia de la comunicación al poner en práctica muchas actividades, así sea estudiar y/o trabajar a distancia para reducir el contagio del SARS-COV-2 o COVID 19, un método eficaz ahorrador de tiempo y dinero que llegó para quedarse una vez pasada la crisis que cobró muchas vidas. Empero, nada es gratuito, el precio es la despersonalización de las relaciones humanas indispensables para la convivencia en sociedad que en buena parte de varias actividades de investigación y desarrollo o en Congresos y reuniones médicas se perdió el saludo, el abrazo cordial, la palabra estimulante, el afecto personal, en pocas palabras la socialización que cumple el postulado de la naturaleza de vivir en sociedad. Por otro lado, se dice “juicio semejante a la doctrina fatalista (de los conformistas, digo yo) que sostiene que todo sucede por un destino inevitable, tesis que va en detrimento de la libertad.
En la proximidad de la navidad, debemos admitir el mayor acontecimiento que conmovió al mundo, dejando indeleble una marca de por vida involucrando a tradiciones ancestrales, religiones y grupos religiosos que aún esperan el advenimiento del mesías, estamos hablando del nacimiento, la palabra y la muerte del hijo de María y José, al quedar para siempre los términos “Antes de Cristo y Después de Cristo”.
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