EL MENTADO “FERROFÉRICO” (o 20 años no es nada)...
Es por lo pronto, estimados lectores de cualquier género, un asunto en que unos cuántos, manejan, saben y prescriben, incluso, soluciones –a modo en su mayoría y, otros con ideas supinas- pero, la realidad es que no es un asunto que se abra de capa ante la sociedad, no sólo y nada más celayense, sino en lo regional y más allá, hasta lo Federal.
Nos dicen oficialmente que ya hay un “90%” en su avance, pero de qué, de la primera etapa parece ser. Y en esta “estimación” cuasi secreta, nos dicen que lo que falta, según un pequeño tramo de 5 kilómetros, sin más explicación. Aunque el problema sustancial ha sido y es uno: La especulación y la avaricia. (Quieren comprar barato y vender caro, a costillas de los ejidatarios y/o propietarios).
Ahora, ya en una mejor posición, desde la formalidad constitucional, la nueva administración –aunque con trazos viejos, ya se percibe-, considera pertinente que el área de Desarrollo Social, intervenga en una mediación para convencer a los ejidatarios o actualmente en proceso de pleno dominio y que habría que aclarar tal estatus; y “pidiendo, que se conduelan los inversores para que adelanten a 2025, no hasta 2026, la culminación de ese proyecto”, al igual sin dejar claro si es total y parcial.
Y debo decir que no estoy en contra de un proyecto como ése, además, consciente de que esta posición no les importa a los inversores, y parece que igual a las nuevas autoridades, que hasta donde se puede colegir, ya “están de acuerdo” con los llamados coloquialmente, “mafia inmobiliaria” (Dicho en el sentido de que se apropiaron y quieren comerse el pastel solos). Mismos que se dice con insistencia tienen incrustados a sus operadores en direcciones y organismos municipales que inciden en el tema, en la gestión actual. Desde luego, aclaro, no es el caso de los titulares de Desarrollo Social y Económico, Municipales, de quienes no es necesario explicitar su vocación social; no sé si sea la misma consideración para otras áreas que deben intervenir, (IMIPE, por citar uno) aclarando que ése ha sido el problema principal: Que el Municipio de nuestra lastimada ciudad, no tenga ninguna ascendencia, ni la intervención que le corresponde, como ya se debe entender, ha sido y sigue siendo un negocio “entre amigos”. Lo que si hay que decir, la situación de este tema o negocio del “ferroférico”, tiene otros fines mercantiles, no el de “aliviar”, por ejemplo, la lacra del paso cotidiano del tren, como fue en un inicio por razón de la complicación de la movilidad (De eso no se habla nada, y parece peor, no importa).
El hecho de que el Gobierno Estatal (Enfatizando al anterior), haya tomado decisiones unilaterales y a modo –sin perjuicio de su buena apariencia jurídica y/o constitucional y/o administrativa y/o económica- para asociarse con una empresa extranjera, habiendo algunas locales o de perdida nacionales, sin esclarecer niveles de participación y menos, de beneficios directos para el Municipio (Impuestos, Derechos, Participaciones, etcétera), pero eso sí con la gran complacencia del anterior presidente municipal o será que no dejó constancia comprobable, como se dice ya de diversos asuntos presupuestarios y, no se rían, de las “camionetas blindadas”, que curiosamente al parecer, no obran o constan datos en la famosa “entrega-recepción”, pero que ya la gente bien nacida se pregunta: ¿Quién va a pagarlas? En fin. Tal vez se tenga la “necesidad” de contratar despachos contables, fiscales y jurídicos del exterior (Local o Nacional) para que vengan a decir lo que todos sabemos o al menos intuimos: Mala gobernanza, que no se duda, abarque, incluso, conductas delictivas.
LA CONDICIÓN SINE QUA NON: No es factible esperar –ya han pasado más de dos décadas- para que tal proyecto ahora con otro nombre: “Puerta Logística del Bajío” (Ya no se trata, al menos formalmente, del “Ferroférico, el Parque Modal, el Puerto Seco II”). El convenio o contrato, que parece se trata de una modalidad de sociedad mixta, es decir, Estado y Particulares, en este caso, incluso, extranjeros, no se ha hecho público, ni sabemos sus cláusulas y condiciones, tampoco que ya conste en los anales registrales –todavía-, ni la Secretaría de Transparencia, da información, ni que Notario o Corredor, haya protocolizado en “nuevo convenio y/o Sociedad Mercantil”, ni mucho menos, con permiso de quién. Porque sencillamente, se apropian de territorio que está aquí, sin óbice de su condición ejidal o de pequeña propiedad –Y no es correcto que la nueva administración, simplemente se acople, antes, debe informar a los celayenses, porque si no, va ser la misma gata que estaba pintada de azul-. Por tanto, estimados lectores, vamos a promover y/o exigir, de manera organizada y con respeto, que se informe de manera transparente a la Sociedad Civil, qué pasa y de qué se trata tal proyecto, no sólo el discurso o rollo político, sino la esencia y, por qué nuestro municipio y otros que puedan intervenir y ser afectados, NO HAN SIDO TOMADOS EN CUENTA en el “negocio”. Es lo que hay. Cuídense.