Todo por el poder, la venganza y el capricho, tristemente hemos presenciado en esta semana y a días de que termine el sexenio cómo México pierde lentamente y de manera desastrosa su democracia y transparencia (la poca que quedaba).
A días de concluir su mandato, el presidente López ha decidido acabar de manera aplastante todo lo que nos quedaba como democracia, desde presentar su propuesta de desaparición de 7 órganos autónomos dedicados a la transparencia, hasta lograr que en la cámara de diputados se apruebe su reforma al poder judicial de la que tanto se ha hablado.
La desaparición de los órganos autónomos es un claro ejemplo de que al presidente y su aprendiz Claudia no les interesa en lo más mínimo rendir cuentas al “pueblo” él no quiere en lo más mínimo que se enteren de qué hace con el dinero, licitaciones, acciones o cualquier actividad que realice el gobierno durante su mandato que está a punto de concluir como el de su predecesora, la falta de información a los ciudadanos no solo es una forma de demostrar su poder y autoridad, sino demuestra que jamás le ha interesado estar del lado de los ciudadanos, quiere seguir robando, ayudando a sus cercanos y que nadie sepa cómo, cuándo y dónde se lo gastó.
Según índices de transparencia, México se encuentra como el peor país evaluado de la OCDE en transparencia y del G20 estamos solamente arriba de Rusia, lo que quiere decir que no es deseo que nadie se entere de lo que sucede tras bambalinas de Palacio Nacional y ningún área de este gobierno, ahora con la desaparición de los órganos dedicados a esto los ciudadanos mexicanos estaremos más que obligados en confiar a ciegas en lo que se hace.
Además con la aprobación de la reforma judicial y el “paro de labores” del Poder Judicial parece que vamos en picada, la falta de coherencia del presidente no deja de sorprendernos, es claro que él va por el control total de país y no podemos olvidar a Venezuela y probablemente no debamos ser tan extremistas pero sí estaremos bajo un control indirecto, jueces que rindan cuentas al ejecutivo, jueces elegidos a modo, jueces que sean faltos de conocimiento y experiencia.
Y para cerrar con broche de oro, las embajadas de Estados Unidos y Canadá, realizan declaraciones por la preocupación que les genera las decisiones del gobierno como cualquier gobierno que tiene invertido dinero en un país ajeno y al presidente se le ocurre declarar que suspenderá relaciones con las embajadas de Estados Unidos y Canadá, lo que termina de afectar al peso con relación a estas monedas y evidentemente esto genera incertidumbre y preocupación a los mercados financieros.
El presidente sigue dando pasos en falso, sigue reaccionando desde su postura defensiva y solo pone en riesgo a todo el país y la seguridad jurídica de todos.
