Meses van y meses vienen y la especulación crece. El Instituto Mexicano del Seguro Social tiene a los alcaldes del corredor industrial con el alma en un hilo, pues todos están esperando la decisión final acerca de dónde se va a construir el nuevo hospital. En particular, en los municipios de Irapuato y Salamanca los alcaldes han apostado fuertemente para que sea en sus territorios donde se construya el nosocomio. También lo había hecho el presidente municipal de Celaya.
Naturalmente, todos quisieran que los habitantes de sus demarcaciones tuvieran el hospital más cerca. Pero la realidad es que la percepción de que tal o cual alcalde logró que la federación “volteara sus ojos” hacia ese municipio podría generar buenos dividendos políticos en elecciones siguientes.
Veamos. En Salamanca se acaba de anunciar que el IMSS acepta de buen grado la donación de un terreno para construir el hospital. Y la verdad es que ahí se expresan como si ya fuera un hecho que se construirá en el municipio.
El pasado 26 de octubre, el Consejo Técnico del IMSS aceptó la donación del terreno de 69 mil metros cuadrados que Salamanca les donó para construir un nuevo hospital regional. La donación del terreno había sido aprobada por el Ayuntamiento el pasado 21 de octubre..
El presidente municipal de Salamanca, César Prieto Gallardo, aseguró que el hospital regional que la institución dirigida por Zoé Robledo construiría en el municipio beneficiaría a más de 218 mil derechohabientes de 10 ciudades aledañas, incluyendo los que viven en Irapuato.
El alcalde César Prieto anunció que se construiría un hospital de 144 camas, en un terreno que –según dice– costó una tercera parte de su valor real, pues quienes eran los propietarios del predio tuvieron la voluntad de bajar su costo, con tal de poder concretar ese proyecto para el municipio. Qué buena onda pero qué raro ¿no?
Ese hospital beneficiaría, según los cálculos del edil morenista, a 218 mil 653 derechohabientes de Salamanca, Valle de Santiago, Moroleón, Uriangato, Yuriria, Jaral del Progreso, Juventino Rosas e Irapuato.
LORENA ALFARO: IRAPUATO NO QUITA EL DEDO DEL RENGLÓN
Lorena Alfaro García, presidenta municipal de Irapuato, está convencida de que la aceptación del terreno donado por Salamanca aún no es garantía de que el hospital regional se vaya a construir ahí.
De hecho, Lorena asegura que Irapuato ha hecho “una gestión impecable” respecto al terreno para donar al IMSS y destacó que apenas el lunes el Ayuntamiento irapuatense acordó la donación del predio al IMSS, por lo que Irapuato sigue cumpliendo con los trámites, requisitos y con la gestión para quedarse con ese hospital regional.
En Irapuato, en sólo un radio de 1.5 kilómetros, habitan alrededor de 31 mil 183 derechohabientes del IMSS y en un radio de tres kilómetros viven alrededor de 61 mil. En este caso, los municipios beneficiados serían Abasolo, Pueblo Nuevo, Pénjamo, Cuerámaro, Huanímaro, Romita y Valle de Santiago lo hacen un lugar ideal para poder albergar el hospital del IMSS de 260 camas que el gobierno federal pretende para Guanajuato.
Llama la atención que el proyecto de Irapuato contempla, según han mencionado fuentes del municipio, un hospital de 260 camas y no de 144, como el de Salamanca. Así que ojalá construyan dos hospitales o ya de perdida que no le hagan “de chivo los tamales” a los guanajuatenses construyendo un hospital de 144 cuando se requiere uno de 260 camas o dos o tres.
INTERESES PARTIDISTAS: NAVARRO
Y quien no se quedó callado fue Alejandro Navarro, alcalde de Guanajuato capital. Navarro lamentó que el gobierno federal haya dejado fuera a la capital del estado para la construcción de la unidad médica IMSS.
Pero no sólo eso. Navarro ha afirmado, con razón, que si el IMSS pidió como requisito a diversos municipios que se le donen terrenos, donde no construya hospital, los alcaldes habrán hecho una apuesta a cambio de nada en la que el Seguro Social incrementa su patrimonio. ¿Ganar-perder?