Al hablar de liderazgo, estamos hablando de una influencia que se ejerce sobre las personas, buscando incentivarlas para que trabajen en forma más eficiente, organizada y buscando un objetivo común.

Esta significación comúnmente es aplicable a distintos ámbitos, en el mundo empresarial, político, educativo, deportivo, militar, científico, social y familiar.

El liderazgo permite que la persona que ocupa esta posición, se distinga por ser capaz de tomar decisiones acertadas para el resto del equipo, en donde su tarea principal es despertar en los que participan un interés para alcanzar las metas propuestas.

Entre los aspectos más relevantes del liderazgo encontramos el crecimiento que aporta a la sociedad, el líder construye un estilo de vida que va encaminado a la transformación de la sociedad, esto mediante trabajo de responsabilidad, creatividad, innovación, buscando ser productivo, asertivo, optimista con la finalidad de lograr una mejor sociedad.

En la actualidad resulta de suma preponderancia contar con perfiles que tengan habilidades para poder conducir y guiar a un grupo, defendiendo los derechos de la colectividad y desarrollando una acción por el bien común reconocida en su comunidad, organización o territorio.

Para poder tener sociedades con un buen liderazgo es fundamental que los ciudadanos se cultiven cada día, que sean personas que no vayan por el camino del egoísmo y el individualismo, por el contrario que sean personas más tolerantes, que busquen una mejor convivencia y oportunidades para todos.

Un verdadero líder busca acordar ideas y no la confrontación de las mismas, algo que en estos días suele ser confundido por personas ignorantes en posiciones de poder. Olvidando que un líder con poder es producto de su entrega al servicio de los demás, sin estar al pendiente de sus propios placeres, siendo el que ayuda y guía a los demás.

El abuso de poder y el afán de lucro, la riqueza, el nepotismo, la malversación de fondos, etc.; es un fenómeno complejo en donde el uso indebido de la autoridad o influencia para obtener beneficios personales, profesionales o institucionales, a menudo en detrimento de otros. Lo que ha llevado a las sociedades a perder verdaderos líderes, generando conflictos sociales.

Cuando existe abuso de poder en un liderazgo autocrático (es un estilo de liderazgo en el que el líder toma las decisiones y espera que los demás las cumplan) resulta en un grave problema que puede tener efectos dañinos para la sociedad. Se presenta la manipulación y el control, hasta la falta de transparencia y la eliminación de la disconformidad. Este tipo de comportamiento pierde la confianza, reduce la moral del equipo, lo que puede llevar a consecuencias legales y éticas graves.

Por lo que es importante, buscar líderes que estén interesados en la transparencia y en crear un ambiente más equitativo y justo, en personas que busquen cultivarse cada día con la finalidad de ser una guía más preparada y certera para el resto de la sociedad.

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